domingo, 7 de junio de 2009

Yo solo quería bailar

Me considero una persona impulsiva, esto tiene sus ventajas y sus desventajas. Por un lado, a veces hago cosas porque simplemente me provocan, no analizo si es bueno hacerlas en ese instante o mejor después, no pienso en las consecuencias y todo me sale mal. Por otro lado, a veces hago cosas que he pensado mil veces antes hacer, pero por mil razones no las hice (casi siempre por timidez) hasta que llega el día en que simplemente digo "es ahora o nunca". Estos últimos impulsos son en cantidad menores en mi vida que los primeros, pero las veces que los experimenté me han traido satisfacciones, aún recuerdo el día de ayer y todo lo que originó un impulso de estos.

Empezaré por contar que la gente en mi trabajo es muy chevere, eso es lo que admiro del departamento de Recursos Humanos :) Todos o para ser más exactos "la mayoría" tienen bastante energía, compartimos intereses comunes, tenemos realidades parecidas, venimos de 3 o 4 universidades, etc. En general, es muy fácil llevarse bien con alguien a pesar de conocerlo poco tiempo. Esto es una de las cosas que me encanta de mi trabajo. Luego de 2 años y medio he conocido a mucha gente, tengo muchos amigos y siempre que nos juntamos la pasamos más que bien. El día de ayer no escapó a ese "pasarla más que bien" con apagón incluido.

Eran las olimpiadas y luego de la premiación usualmente hay una fiesta. Es usual que compartas la mesa con la gente de tu área, gerentes, jefes, asistentes, etc. todos juntos compartiendo y conversando de cualquier cosa entre cerveza y cerveza. En un momento alguien se para a bailar y poco a poco la pista de baile se va llenando, no importan mucho los rangos, puedes terminar bailando con cualquiera y todos la pasan bien. Muchos chicos busca con quien bailar y cualquier chico al que saques a bailar usualmente te dice "sí, vamos". Con rodilla herida incluida y ambas piernas a punto de colapsar después de una mañana de puro deporte, nada impidió estar pegada a la pista de baile.

Practicamente había bailado con todos los chicos de mi área y con algunos conocidos más. Pasada la tarde, algunos cansados iban regresando a sus casas, poco a poco el lugar tenía menos personas, yo como es usual quería quedarme hasta el final. Como muchos de mis amigos se habían ido ya no había con quien bailar. De repente, miré alrededor de la pista de baile y vi a lo lejos dos "conocidos" hablando, con uno de ellos converso casi a diario y bailé varias veces en la primera parte de la fiesta; con el otro no hablo nunca, solo trabajé algún tiempo con él dentro de un equipo de soporte y no somos los grandes amigos, quizá por eso no busqué bailar con él antes ni acercarme, quizá no tenía tanta confianza con él como para hacerlo o quizá era algo más lo que me impedía acercarme, qué pasaba?

Pensando más profundamente sobre este tema, a pesar de que fue poco tiempo que trabajamos juntos, este chico siempre me pareció un chico interesante. Durante el tiempo que trabajamos juntos e incluso después no tuve la oportunidad de conversar o interactuar con él fuera del trabajo, quizá porque estaba más enfocada en conocer a la gente de mi área y no teníamos amigos en común ya que trabajabamos en áreas distintas. Por todo ello pienso que no había razón en que alguno de los dos buscara algún tipo de acercamiento. A pesar de ello, en cualquier evento siempre me saludaba o intercambiabamos 3 o 4 palabras, incluso esa misma mañana en la maratón se acercó a saludarme.

Con esos pocos antecedentes, adicionando algo de timidez, miedo al rechazo y el que usualmente bailo con gente conocida, surgió de repente el impulso del "es ahora o nunca". Por alguna razón quería bailar con él y esa idea se plantó en mi cabeza, así que caminé sin dudar y simplemente lo tomé de la mano y le dije "vamos a bailar". El resultado fue el esperado: le dijo a su amigo "disculpa, pero no puedo rechazar esta oferta" y fuimos a bailar y bailamos por horas, las que le quedaban a la fiesta antes que terminara. Luego de eso me sentí tan bien, fue como vencer un miedo, y lo que solo fue un "quiero seguir bailando" se convirtió en una satisfacción mayor y en un momento chevere que no quería que terminara.

Creo que para muchos de nosotros quizá es difícil acercarse a esa persona que nos parece interesante o que nos da curiosidad, pero bueno, si son de ese tipo como yo les recomiento que vayan buscando vencer ese miedo porque se pueden estar perdiendo de mucho. Prueben el "es ahora o nunca", que si todo sale bien pueden ser muy felices, y no hablo solo en tema de relaciones, sino en su vida en general. Si las cosas no salen como esperas siempre habrá una nueva oportunidad para volverlo a intentar, no creen? Me encanta este segundo impulso, me encantó conocerte chico misterioro ya que me alegraste el día :)

2 comentarios:

  1. Que buenas las cronicas del fin de las limpiadas, jajajajaja

    Pero buena con el galan ;) Solo discrepo con una cosa de tu post, bueno no, en fin...tu area es de gente mas proactiva, nada mas, jajajaja (tu entiendes)

    ResponderEliminar
  2. :P jajaja este chico es de un área nada que ver con la mía jajaja

    ResponderEliminar